Acampar a la orilla del mar es una posibilidad, aunque también hay chozas ecológicas construidas con el estilo tradicional “wotoch” con techo de huano o palma de la vivienda maya, ubicadas a la orilla del mar.
La ruta principal lleva al cenote Dzonot-Tzik, un ojo de agua dulce y cristalina donde por efecto del huracán Isidoro quedaron atrapados algunos sábalos que con los años han crecido más de 60 cm y con los que puedes nadar o sumergirte con el snorquel tranquilamente.